FACSA consolida su compromiso con el medio ambiente y la formación de los más pequeños a través de su proyecto educativo y de sensibilización ‘El Curso del Agua’. Una iniciativa que arrancó en el curso escolar 2015-2016 y por la que, durante estos tres años, ya han pasado más de 5.100 personas procedentes de 55 centros diferentes, desde colegios públicos como privados y concertados a entidades como el centro socioeducativo de menores Pi Gros, gestionado por la Fundación Diafragma, AFANÍAS, el Centro de Educación Especial (CEE) Penyeta Roja, el CEE Castell Vell, el CEE La Panderola de Vila-real o la Residencia de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados de Castellón, entre otros.
Únicamente durante el presente año han sido más de 1.600 los escolares de 28 centros que han participado en esta actividad, que pretende dar a conocer, de una manera sencilla y amena, en qué consisten el ciclo integral del agua y sus diferentes fases -captación, distribución, abastecimiento, saneamiento, depuración y reutilización-, además de generar en los asistentes una mayor conciencia sobre la importancia de hacer un uso más responsable y consciente de este recurso natural.
La iniciativa, especialmente dirigida escolares de primer ciclo de Primaria, ha sido pionera en el uso de materiales pedagógicos innovadores, como la realidad aumentada o las proyecciones en 3D, además del desarrollo de una APP propia, un cómic y divertidos experimentos prácticos, para mostrar a los asistentes cómo promover una gestión más racional del agua de la mano de cinco personajes animados.
“Haber tenido la oportunidad de contribuir, a lo largo de estos tres años, a la formación y concienciación de los más jóvenes para que, desde edades tempranas, conozcan en qué consiste el ciclo integral del agua y, a su vez, sean conscientes de lo importante que es hacer un uso responsable de este recurso, es algo que nos llena de satisfacción”, ha explicado el director general de FACSA, José Claramonte, que ha recordado además que “en definitiva, nuestro objetivo es promover acciones que contribuyan a producir de forma paulatina los cambios de comportamiento necesarios para resolver uno de los grandes retos de la sociedad, como es el uso racional del agua”.
Las distintas actividades se desarrollan en una moderna y versátil aula divulgativa que la empresa ha dotado de equipos adaptados a las nuevas tecnologías. Además, el aula cuenta con una zona habilitada como taller experimental, donde el alumnado puede aplicar de forma práctica los conocimientos adquiridos.
En ese sentido, a través de esta actividad, FACSA apuesta por promover una mayor sensibilización, especialmente entre las nuevas generaciones, a la hora de impulsar acciones que contribuyan a proteger el medio ambiente, cuidar el entorno y salvaguardar los recursos naturales.