Esta semana Bruselas se ha convertido en el punto de encuentro para avanzar en la modificación de la normativa europea EN 16325 sobre “Garantías de Origen relacionadas con la energía”.
La jornada ha reunido tanto al grupo de trabajo europeo (CEN/CLC/JTC 14/WG 5 «Guarantees of Origin related to energy») como al nacional (CTN-UNE 216/GT 9) para evaluar los resultados y comentarios de la consulta del borrador de la norma, así como acordar próximos pasos.
El objetivo de estos grupos, formado por profesionales como Malú Barrera, responsable del departamento de Bioenergía de Facsa, es lograr incluir en la norma garantías de origen, vectores energéticos más allá de la electricidad renovable, el único que incluye actualmente. Concretamente, los vectores que estos grupos defienden que sería necesario añadir son los hidrocarburos gaseosos -biometano, biogás, etano, propano, etc.-, hidrógeno, calefacción y refrigeración.
Cabe destacar que el trabajo se realiza en los organismos CEN (Comité Europeo de Normalización) y CENELEC (Comité Europeo de Normalización Electrotécnica) ambos reconocidos por la Unión Europea como responsables de elaborar y definir las normas voluntarias en el ámbitoeuropeo. La revisión de la norma se establece como mandato de la Directiva Europea de Energías Renovables (RED II) aprobada por la Comisión Europea.
