Esta mañana Pascual Maximino, Director del área de abastecimiento de FACSA y Manolo Breva, jefe de explotación de Castellón, han presentado junto al Alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, el concejal de sostenibilidad Gonzalo Romero y la concejala de movilidad Carmen Albert, los nuevos vehículos eléctricos que la empresa ha incorporado a los servicios de mantenimiento municipal en materia de agua en tareas como la lectura y sustitución de contadores, reparaciones, inspecciones y presupuestos así como todo tipo de trabajos que realizan sus operarios en el día a día con mayor agilidad y de manera totalmente sostenible.
Las nuevas adquisiciones, los vehículos ‘Twizy’ eléctricos, cuentan con una mecánica eléctrica “cero emisiones” que permite el desplazamiento de los trabajadores por el casco urbano respetando el medio ambiente. Se trata de vehículos pequeños, muy versátiles a la hora de circular por el casco urbano. Los vehículos cuentan con la autonomía, el espacio y la capacidad necesaria para efectuar los servicios de mantenimiento que FACSA realiza en la ciudad.
Bataller ha agradecido a FACSA su implicación en el proyecto y explicado que “este tipo de medidas contribuyen a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos” y es que este resulta un paso más en la aportación de la compañía por la lucha contra el cambio climático.
Esta nueva iniciativa de FACSA se suma a las acciones que ya ha implantado por su latente compromiso por mejorar la sostenibilidad medioambiental y energética de sus servicios. Hace unas apenas dos semanas, FACSA certificó la cuantificación de su Huella de Carbono (HC) en la estación de depuradora de aguas residuales de Almassora, midiendo la emisión de los gases efecto invernadero de su actividad. Además, la firma dispone también las certificaciones ISO 14.001 e ISO 50.001 muestra de que todos los procesos de la empresa cuidan al detalle aspectos relaciones con la protección del medio ambiente y la optimización energética.