El presidente de la Diputació de Girona y del Consorci d’Aigües Costa Brava Girona, Miquel Noguer, y el alcalde de Castelló d’Empúries, Salvi Güell, han presentado la planta solar fotovoltaica que se ha instalado en la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de Castelló d’Empúries, situada en Empuriabrava. El propósito de esta actuación es dar un paso adelante hacia la autosuficiencia energética de la planta y contribuir a una mejor sostenibilidad ambiental.
Las obras, que tuvieron una duración de dos meses, supusieron una inversión de 108.869,20 euros, sin IVA. La financiación ha ido a cargo de la UTE Servicio de sistemas de saneamiento en alta CCB-ELA, formadas por las empresas Facsa y Constructora de Calaf, a quienes el Consorci d’Aigües Costa Brava Girona tiene adjudicada la gestión de los sistemas de saneamiento de agua en alta en la zona norte.
Con este proyecto, Facsa continúa su proceso de expansión en Cataluña, donde ya gestiona los servicios de abastecimiento de agua en alta y saneamiento de agua residuales de la Costa Brava, el servicio de abastecimiento de agua de Llinars del Vallès y la explotación de la EDAR de Granollers.
En total, se colocaron 234 placas solares en una superficie de 1.200 metros cuadrados, con una potencia total instalada de 105,3 kW. Con el fin de optimizar su actuación, se realizaron previamente estudios que han permitido dimensionar la potencia de la radiación solar y localizar la ubicación más adecuada. En este sentido, las placas se encuentran instaladas sobre estructuras de hormigón que permiten una inclinación de los módulos que reduce las acciones del viento, muy frecuentes e importantes en el Alt Empordà.
La producción de energía anual estimada es de unos 156 MWh en autoconsumo en la propia depuradora. Se calcula que supondrá el 21,5% del consumo medio anual del equipamiento, contribuyendo a una importante reducción de su factura eléctrica. Durante el verano, se puede llegar hasta un máximo de 550 kWh/día, mientras que en invierno será de unos 300 kWh/día.
Tal y como ha explicado Mairena García, jefa de explotación, “esta iniciativa, que permite minimizar la huella de carbono de nuestros clientes, reafirma el compromiso de Facsa por evolucionar hacia un nuevo concepto de EDAR más sostenible. Esto es posible gracias a los procesos internos de innovación y a la implementación de nuevas tecnologías”. La compañía apuesta por la sostenibilidad como eje central de su estrategia empresarial, entendida como un impacto global en su organización a nivel transversal y en todo su entorno, no solo medioambiental, sino también económico y social.
El presidente de la Diputació de Girona, Miquel Noguer, ha subrayado: “En el Consorci d’Aigües siempre hemos apostado por la sostenibilidad y ahora, en una situación de cambio climático, todavía hemos reforzado más nuestra vocación medioambiental y estratégica en el territorio, en la línea de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, los ODS. Esta actuación contribuirá a reducir el consumo eléctrico y, al mismo tiempo, reducir las emisiones de CO2”.
Las fases del proceso
Los trabajos realizados han consistido, en primera instancia, en la adecuación previa del terreno, que ha incluido la instalación de un tubo de drenaje para facilitar la evacuación del agua de lluvia, la colocación de una lámina geotextil para impedir el crecimiento de vegetación y la cubrición con capa de gravas.
Posteriormente, se han colocado las estructuras de hormigón diseñadas por el soporte de las placas solares fotovoltaicas y, finalmente, se ha procedido a su sujeción.
Esta instalación ha estado también integrada en el sistema de control de la EDAR de Empuriabrava para evaluar y realizar el seguimiento de su funcionamiento. De esta forma, se puede tener el control tanto de la energía producida como consumida.
