- Nueve compañías del holding cuentan ya con un Plan de Igualdad avalado por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales
- Un 42% de la plantilla de las empresas de Grupo está compuesta por mujeres
La Carta de las Naciones Unidas de 1945 fue el primer acuerdo internacional que afirmó el principio de igualdad entre hombres y mujeres. Desde entonces, la ONU ha contribuido a la creación de un legado histórico de estrategias, normas, programas y objetivos definidos para mejorar la condición de las mujeres, entre los que se encuentra la declaración del Día Internacional de la Mujer. Una fecha destacada en el calendario, celebrada hoy en multitud de países, que las compañías de Grupo Gimeno han querido conmemorar un año más.
En este marco, y respondiendo a su compromiso en esta materia, nueve de las compañías del holding cuentan ya con un Plan de Igualdad, compuesto por un conjunto de medidas encaminadas a alcanzar la igualdad efectiva de trato y de oportunidades entre hombres y mujeres, así como a eliminar la discriminación por razón de sexo.
Por parte de la división de Gimeno Servicios, FACSA, FOBESA, FOVASA Medio Ambiente y FOVASA Mantenimiento y Limpieza renovaron recientemente su Plan de Igualdad por tercera vez consecutiva, mientras que FOVASA Seguridad aprobó en 2017 su primer programa en esta materia. Por su parte, IPROMA lo acreditó el pasado año por segunda vez.
En lo relativo al área de Turismo y Ocio, INTURCOSA renovó en 2018 su Plan de Igualdad por tercera vez consecutiva, mientras que Inturfood lo aprobó por primera vez ese mismo año.
A las compañías anteriormente mencionadas se ha unido recientemente GIMECONS, compañía de la división de Construcción de Grupo Gimeno, que aprobó en 2018 su Plan de Igualdad.
Cada una de estas empresas ha establecido en su Plan los objetivos concretos a alcanzar, así como las estrategias y prácticas a adoptar para su consecución y los sistemas de seguimiento y evaluación de los objetivos fijados.
Todos ellos afectarán – siempre atendiendo a las peculiaridades de cada compañía- a los procesos de selección y contratación, la clasificación profesional, la formación, la promoción profesional y las condiciones de trabajo -incluida la auditoría salarial entre mujeres y hombres- así como al ejercicio corresponsable de los derechos de la vida personal, familiar y laboral, la infrarrepresentación femenina, las retribuciones y la prevención del acoso sexual y por razón de sexo.
